Mal aliento (halitosis) en perros y gatos: ¿a qué se debe?
El mal aliento o halitosis en nuestras mascotas es un problema bastante común que, aunque a veces se considere algo “normal” en perros y gatos, en realidad puede estar avisándonos de un problema de salud mayor. Hay veces que el problema se limita a ser una acumulación de sarro pero otras veces pueden ser factores más serios que pueden requerir una visita al veterinario. A lo largo de las próximas líneas vamos a ver el tema en profundidad.
¿Por qué mi mascota tiene mal aliento?
La halitosis no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma. Lo que nos indica es que algo no está funcionando bien en la boca o en el organismo de nuestro perro o gato y, por supuesto, las causas pueden variar mucho dependiendo de la edad y la alimentación, pero estas son las más habituales:
Acumulación de placa y sarro
Es, con diferencia, la causa más común. Igual que sucede en los humanos, si no limpiamos con frecuencia la boca de nuestros animales, los restos de comida se acumulan entre los dientes y las encías, provocando la aparición de bacterias. Estas bacterias generan el mal olor y, con el tiempo, pueden provocar gingivitis, periodontitis o incluso la pérdida de piezas dentales.
Dieta incorrecta o problemas de hidratación
Una alimentación poco equilibrada o con bajo contenido en fibra puede favorecer la acumulación de residuos entre los dientes. Además, la falta de agua fresca o el consumo de alimentos blandos de forma exclusiva impide que el animal elimine parte de la placa bacteriana de manera natural al masticar.
Heridas en la boca
A veces, lo que provoca el mal olor es tan simple como un trozo de hueso, madera o juguete atascado entre los dientes o en el paladar que han podido generas roces, heridas o llagas que puedan generar bacterias y, por tanto, halitosis.
Enfermedades más graves
En algunos casos, el mal aliento puede estar vinculado a problemas más serios como enfermedades renales, hepáticas o diabetes. En estas situaciones, el olor suele ser más intenso o con características particulares (por ejemplo, un aliento dulce en casos de diabetes). Ante este tipo de señales, lo mejor es realizar una visita al veterinario para descartar patologías internas.
¿Cómo podemos tratar y prevenir el mal aliento en perros y gatos?
El tratamiento de la halitosis depende de la causa que lo provoca, por lo que lo primero debe ser identificar el origen del problema. Sin embargo, hay una serie de hábitos y cuidados que ayudan a mantener una buena salud bucodental y a prevenir el mal aliento:
Higiene
La mejor forma de combatir el mal aliento es establecer una rutina de limpieza dental desde temprana edad para perros y gatos. Existen cepillos y pastas de dientes específicas para perros y gatos que no contienen flúor y son seguras para su uso. Aunque al principio puede costar, con paciencia muchos animales se acostumbran sin problema a pasar por esta rutina de higiene.
Alimentación adecuada
Lo hemos hablado muchas veces, pero es muy importante ofrecer una dieta de calidad, equilibrada y adaptada a la especie y edad de nuestra mascota. El pienso seco suele ser preferible en muchos casos porque ayuda a reducir la acumulación de sarro. También existen snacks y piensos diseñados para proteger y cuidar el estado de los dientes, ya que ayudan a mantener la boca más limpia.
Revisiones periódicas
En Clínica Veterinaria Argos, recomendamos realizar revisiones orales al menos una vez al año. En ellas, podemos comprobar en que estado se encuentra la dentadura y encías de tu mascota, detectar problemas a tiempo y, si es necesario, realizar una limpieza profesional bajo anestesia, que elimina de forma segura todo el sarro acumulado.
Hidratación constante
Asegúrate de que tu mascota tiene siempre agua fresca disponible. Una hidratación favorable ayuda a reducir la acumulación de bacterias en la boca.
¿Cuándo debería preocuparme?
El mal aliento no siempre es un problema menor. Si el olor es muy fuerte o aparece de forma repentina, o si viene acompañado de otros síntomas como encías inflamadas, sangrado o falta de apetito, es recomendable acudir al veterinario cuanto antes.
En muchos casos, la halitosis se puede tratar fácilmente si se detecta a tiempo. Pero si se deja pasar, puede acabar provocando dolor, infecciones o incluso la pérdida de dientes. Por eso, aunque pueda parecer un problema sin importancia, lo mejor es no ignorarlo. No hay que normalizar el mal aliento en perros y gatos, ya que puede estar provocado por algo tan simple como sarro acumulado o ser un síntoma de un problema mayor.

Veterinario Especialista en Dermatología Canina y Felina | Máster en Anestesiología
Director de Clínica Veterinaria Argos desde hace 30 años.
Comprometido con la medicina veterinaria, especializado en dermatología canina y felina, así como en anestesiología. Participo activamente en congresos nacionales e internacionales para mantenerme al día de las nuevas tendencias y tratamientos.