¿Cómo cuidar de una perra embarazada?
Si tenemos una perra embarazada, hemos de embarcarnos en unos cuidados que la ayuden a sobrellevar este proceso. La gestación puede ser agotadora y hacerse complicada para ella si no tiene el apoyo suficiente. Por eso, queremos ofrecer aquí una lista con consejos que podamos aplicar en nuestros hogares para que sepamos cómo responder cuando nos encontremos en una situación así.
¿Cómo plantear los cuidados de una perra embarazada?
Habrá algunas cosas que tendrán que cambiar en la interacción con ella.
Entender su comportamiento
Algunos de los síntomas del embarazo van a afectar a la conducta de la perra, y no solo a su propio físico. Cambios de humor o una menor actividad física son algunos de los más comunes. Lo ideal es que la bajemos mucho más a menudo a pasear y que las vueltas sean mucho más cortas. El motivo es que, a medida que avanza en el embarazo, la vejiga tendrá menos espacio en el interior de su cuerpo, motivo por el cual orinará más.
Es normal, en definitiva, que pueda hacerse pis en casa cuando no sea capaz de aguantar más. Tendremos que estar atentos ante este tipo de síntomas y tratar de acompañarla lo mejor posible a lo largo de todo este proceso.
Puede que notemos, además, otro cambio en su comportamiento. Generalmente, a medida que se vaya acercando la hora del parto, buscará un rincón de la casa adecuado para dar a luz a sus cachorros. Probablemente, elija una zona oscura. No debemos preocuparnos si empieza a pasar más tiempo en ese espacio.
Cambiar la alimentación
Un embarazo dura alrededor de 64 días. Durante los dos primeros tercios, lo ideal es mantener su alimentación intacta. Sin embargo, en el último tercio sí que habrá que empezar a incluir cambios. Los cachorros que lleva en su interior no dejarán de crecer y de demandar alimentos. Por lo tanto, lo ideal es consultar con un veterinario y darle a la perra alimentos mucho más calóricos.
De esta manera, tendrá la energía necesaria para seguir nutriendo a sus cachorros. En función del tamaño de la perra, habrá que optar por unas opciones u otras. Por eso, recomendamos consultar siempre con un especialista cada caso particular para afinar más la alimentación.
¿Qué precauciones hay que tener con su higiene?
¿Hay que bañarla tan a menudo como antes? Lo ideal es darle un baño al inicio del embarazo y otro a mitad de este. Los días previos hay que evitarle cualquier clase de estrés. De la misma manera, mientras la estemos enjabonando tendremos que preocuparnos de no apretar su vientre ni nada parecido.
Y, también, hemos de acordarnos de emplear geles que no tengan ningún tipo de toxina que pueda absorber. Al margen de esto, la higiene no ha de suponer mayor complicación.
¿Qué hacer en el momento del parto?
Si tenemos que pasar también este momento con ella, hay algunas consideraciones que podemos tener en cuenta. La primera de ellas es ayudarla a crear un nido agradable en el cual vaya a dar a luz. Una vez que sepamos qué zona de la casa ha elegido, podemos poner mantas o cojines viejos para que esté cómoda.
Luego, tras el parto, tenemos que cortar el cordón umbilical de los cachorros y retirar las placentas para que no se las coma. También podemos acariciarla cuando empiece a experimentar contracciones. Será una manera de estimular el parto.
Si tenemos más dudas acerca de cómo debemos cuidar una perra embarazada, siempre podemos consultar con una clínica veterinaria. Nosotros ofrecemos asesoramiento y cualquier otra ayuda que el dueño de una perra pueda necesitar para que estos procesos naturales se vivan sin ningún riesgo.
Veterinario Especialista en Dermatología Canina y Felina | Máster en Anestesiología
Director de Clínica Veterinaria Argos desde hace 30 años.
Comprometido con la medicina veterinaria, especializado en dermatología canina y felina, así como en anestesiología. Participo activamente en congresos nacionales e internacionales para mantenerme al día de las nuevas tendencias y tratamientos.